Masturbación y sexo telefónico

La importancia de la masturbación

Afortunadamente, hace muchos años que la sociedad se ha vuelto mucho más permisiva con todo lo que concierne a la masturbación. La mayoría de nosotros sabemos de la importancia de experimentar con nuestro cuerpo, saber qué nos gusta y que no. En este sentido, masturbarse a menudo se torna como algo imprescindible para aprender cuáles son nuestras preferencias en la cama, así como para tener una vida sexual plena, tanto a nivel individual como en pareja. Además, la masturbación nos aporta muchos otros beneficios – ampliamente demostrados científicamente- que veremos en las siguientes líneas:

Desinflamación de la zona genital: puede parecer una leyenda urbana, pero en realidad es cierto que cuando pasamos demasiado tiempo sin masturbarnos nuestros genitales suelen inflamarse. Esto se debe, entre otras razones, a la acumulación de semen y fluidos corporales en los testículos o en la vagina. La inflamación en la zona de los genitales provoca dolores, pinchazos y otras molestias nada recomendables. Al masturbarnos de manera regular, estos dolores se verán disminuidos.

Fortalecimiento del sistema inmunitario: hay numerosos estudios científicos que han demostrado que la eyaculación regular evita que los hombres contraigan infecciones bacterianas en sus genitales. El semen es proclive a la acumulación de bacterias, por lo que su expulsión regular hará que las bacterias no tengan la ocasión de proliferar. Por otro lado, los hombres que se masturban regularmente – entre 4 y 7 veces por semana- tienden a acumular más inmunoglobina A (IGA) en su organismo, de modo que son más resistentes a infecciones víricas como la gripe y el resfriado.

Más y mejor conciliación del sueño: la masturbación es una de las mejores herramientas a la hora de combatir el insomnio. Los orgasmos regulares hacen que nuestra libido sexual disminuya, lo que se traduce en una reducción considerable del estrés y la ansiedad. Ambos dolencias, se consideran las principales promotoras del insomnio. Además, durante el orgasmo el cuerpo humano libera dos compuestos químicos estrechamente relacionados con el sueño: la vasopresina y la oxitocina. Estas dos sustancias liberan un torrente de melatonina en nuestro organismo, la cual nos permite disfrutar de un sueño mucho más reparador.

Mejor humor: otra sustancia química que liberamos al alcanzar el orgasmo es la dopamina, la cual la ciencia ha identificado como la hormona de la felicidad. Cuando más nos masturbamos, mayores niveles de dopamina libera nuestro organismo y, por tanto, de mejor humor estamos. Por ello, muchas personas son adictas a tocarse. Masturbarse de manera regular no es peligroso, salvo que se tenga una actitud demasiado obsesiva hacia ello.

En la actualidad, tenemos a nuestra disposición una amplia variedad de métodos de masturbación en solitario. Por ejemplo, hay muchos hombres y mujeres que se tocan con juguetes eróticos. Otras personas lo hacen viendo pornografía convencional o en los famosos videochats porno. Sin embargo, las líneas eróticas, aunque menos extendidas, son también otra manera muy interesante y divertida de masturbarse en solitario. En el siguiente apartado del presente artículo veremos en que consiste este servicio para adultos enfocado en la masturbación en solitario.

¿Cómo funcionan las líneas calientes?

Las líneas eróticas es un servicio para masturbación en solitario que llega varias décadas entre nosotros, aunque no ha sido hasta hace pocos años cuando se han puesto de moda entre la población. El principal motivo de su polarización repentina se debe a que la sociedad ya no ve el sexo como un tabú. Algo que sí sucedía hace tan solo unos años. Ahora, servicios como el sexo por teléfono con chicas atractivas y calentorras ha dejado de ser algo mal visto para convertirse en un servicio al que muchos hombres y mujeres recurren cada vez que tienen ocasión. Por norma general, las líneas calientes funcionan de la siguiente manera:

1- El cliente escoge un teléfono porno para hacer la llamada como puede ser Lineashot: 803 460 770. Las tarifas y las chicas disponibles harán que se decante por uno u otro servicio. No obstante, la mayoría de las líneas eróticas tienen la misma tarifa: 1,21 euros/minuto (red fija) y 1,57 euros/minuto (red móvil).

2. A continuación, hará la llamada, y esta será contestada por una de las decenas o cientos de teleoperadoras profesionales del sexo telefónico, en cuestión de segundo.

3. Finalmente, tanto el cliente como la chica disfrutarán durante el tiempo que deseen de una interacción telefónica de corte erótica. Por ejemplo, el usuario irá requiriendo que la teleoperadora porno le vaya satisfaciendo sus fantasías eróticas, o bien que le cuente sus experiencias sexuales o cómo va vestida en ese momento. Por supuesto, estos servicios de sexo por teléfono ponen a disposición de los clientes mujeres de todo tipo. Chicas jóvenes, maduras, transexuales, gays, parejas, etc. Tanto de nacionalidad española como de países como Colombia, Venezuela, Argentina, Francia, Italiana, Rumanía...

Las líneas calientes son un servicio que nos permite cumplir cualquiera de nuestras fantasías eróticas, mientras escuchamos los gemidos y gritos de placer de hermosas y sensuales chicas de todo el mundo. Por ello, se han convertido en la solución perfecta para disfrutar de la masturbación en solitario. Para experimentar increíbles orgasmos que nos den la posibilidad de disfrutar de todos los beneficios que la masturbación regular nos aporta, y que comentamos en el anterior apartado.

¿Qué debemos saber antes de llamar a las líneas calientes?

Para sacar el máximo provecho al sexo por teléfono es imprescindible seguir estos pasos:

1. Llamar en el momento adecuado: es importante escoger el momento del día adecuado para telefonear a las líneas calientes. Esto significa que debemos elegir una hora en la que sepamos al 100% que nadie nos va a interrumpir la llamada. La idea es disfrutar del momento, de modo que podamos tener un orgasmo increíble. Para ello, es necesario estar relajados, tranquilos y sin distracciones.

2. Esperar a que nos atiendan la llamada: obviamente, el siguiente paso es permanecer en el teléfono hasta que una persona nos atienda (lo cual no suele llevar más que unos pocos segundos). A continuación, debemos escoger con quien queremos charlar: una chica, un chico...

3. Dejar que la conversación fluya: no es recomendable ir directamente al grano, pues esto puede provocar que aparezcan las prisas y los nervios. Recordad que es importante estar relajados y que nadie aquí nos juzgara. De hecho, la mayoría de quienes atienden las llamadas lo hacen por puro placer y por ganas de experimentar cosas nuevas, más que por ganar dinero. Por ello, es importante dejar que toda fluya de manera espontánea.

4. Terminar la llamada cuando creamos conveniente: si hemos alcanzado el orgasmo, si nos aburrimos, o no queremos seguir con la llamada, será tan sencillo como colgar.